Soñar durante las noches es uno de los procesos fisiológicos más comunes en los seres humanos. Sin embargo, durante los últimos meses, dicha actividad pudo haber sufrido severos cambios producto de la pandemia. Eso significa que, tras el confinamiento, el contenido de nuestros sueños ha cambiado y somos más propensas y propensos a tener sueños pandémicos que saquen a relucir nuestros miedos, sentimientos o pensamientos más negativos, casi como si estuviéramos dentro de una película al estilo de Pesadilla en la calle del infierno.

El portal PLOS ONE publicó una investigación donde un grupo de psicólogos y expertos en neurociencia estudió 239 reportes de sueños de 67 personas, realizados antes del brote de COVID-19 o durante los meses de marzo y abril de 2020, cuando se impuso el bloqueo en Brasil luego de la declaración de la pandemia de la OMS. En el reporte se señala que «La neurociencia y la psicología están de acuerdo en que soñar ayuda a las personas a lidiar con las emociones negativas y a aprender de la experiencia, pero ¿puede el soñar revelar efectivamente el sufrimiento mental y los cambios en el comportamiento social?«.

En efecto, los resultados han revelado las emociones negativas que los individuos proyectan durante el confinamiento y la pandemia por COVID-19. Por lo tanto, se ha determinado, aplicando herramientas de procesamiento de lenguaje natural, que el enojo y la tristeza se han vuelto las emociones más comunes durante los sueños a medida que avanza la emergencia sanitaria. Asimismo, han corroborado una hipótesis que dicta que las personas tienen vínculos más fuertes con temas como la contaminación y la limpieza, padecen mayor sufrimiento mental, miedo al contagio y drásticos cambios en los hábitos individuales diarios que impactan directamente en la socialización como, por ejemplo, aquellos que no prestaban tanta atención a la higiene de manos antes del brote.

«Estos resultados corroboran la hipótesis de que los sueños pandémicos reflejan sufrimiento mental, miedo al contagio y cambios importantes en los hábitos diarios que impactan directamente en la socialización», se menciona en el estudio.

El estudio reveló que el confinamiento por COVID-19 generó cambios drásticos en el contenido de los sueños de las personas. Algo muy similar a lo que sucede con los individuos que sufren por plagas, guerras o algún tipo de desastre natural.

«La comparación de informes de sueños refleja una experiencia traumática colectiva, como suele ser el caso durante plagas, guerras y desastres naturales», comentan en la investigación.

Los investigadores han concluido que los resultados, antes expuestos, apoyan la hipótesis de que los sueños durante el confinamiento, de la primera ola de la pandemia, son algo así como una representación de los desafíos que cada persona enfrentó durante esta etapa tan difícil. No obstante, los responsables del estudio también han admitido que los resultados pueden variar significativamente en los próximos meses, porque aún falta determinar cómo es que cambian los sueños en las personas a medida que el virus y la muerte se hagan sentir más.

Y a propósito de los sueños, en el siguiente enlace te contamos cuántas horas necesitas dormir para evitar el deterioro cognitivo.

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