Hace casi veinte años arribó a cines una comedia musical que (parcialmente) vino a minar la trayectoria de su actriz protagónica. Sin embargo Rachael Leigh Cook no tiene más que buenos pensamientos hacia Josie and the Pussycats (2001), que si bien fracasó en taquilla, es actualmente considerada una cinta de culto.

En una reciente conversación con Collider, la histrión norteamericana mencionó algunas de sus comedias románticas favoritas de los años 90. Entonces salió a colación el título Can’t Hardly Wait (1998), cinta para la cual Cook confesó haber audicionado —aspiraba al papel que finalmente caería en manos de Jennifer Love Hewitt— y que de alguna manera abrió el camino para su fichaje en Josie and the Pussycats.

Ambas películas tuvieron por directores a Deborah Kaplan y Harry Elfont, quienes (según sospecha la entrevistada) ya le tenían puesto el ojo desde aquella audición, lo cual garantizó su participación en la subsecuente comedia musical.

Desafortunadamente, Josie and the Pussycats únicamente recaudaría $14.8 millones de dólares a nivel global —frente a un presupuesto estimado de $39 MDD— aunado a que recibiría críticas iniciales no muy favorables. Semejante fracaso, a parecer de Rachael Leigh Cook, los condenaría a ella y al equipo detrás de la producción a la «movie jail», término para referir al limbo laboral que sufren algunos actores o directores tras un proyecto fallido.

Mas la histrión finalmente pudo proseguir con su carrera y no guarda ni el mínimo rencor hacia aquella película, sino todo lo contrario.

«De alguna manera, todos caímos en lo que dentro de la industria se denomina ‘cárcel fílmica’ por ese fracaso en taquilla y la gente tardó muchos años en comprender aquella película [Josie and the Pussycats]», comentó Cook a Collider. «Me alegro de que hayamos hecho algo de lo que todavía estoy orgullosa. Fue un camino un poco accidentado a partir de ahí, pero tenemos algo genial que mostrar y ahora estamos hablando de una película que realmente amo, así que supongo que todo resultó como se suponía que debía ser.»

Josie and the Pussycats se basa (libremente) en las homónimas historietas de Archie Comics, así como en la homónima serie animada de Hanna-Barbera Productions. Cuenta la historia de una banda femenina de rock que termina implicada en una conspiración consistente en emitir mensajes subliminales a través de la música popular.

A Rachael Leigh Cook próximamente la veremos en la película de Netflix Amor garantizado, cuyo estreno será este jueves 03 de septiembre.

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