El coronavirus ha sido una enfermedad que además de ser un enorme problema de salud a nivel mundial, también trajo consigo otra clase de situaciones complicadas como el desempleo. Muchas personas perdieron su trabajo gracias a la pandemia, pero hay historias que nos hacen valorar todo lo que tenemos como esta que estamos por contarles, pues un abuelito le ganó al COVID-19 pero se quedó sin empleo y ahora busca a toda costa salir adelante.
Resulta que hace algunos días empezó a viralizarse el nombre de Don Felipe Perch, un hombre de 74 años originario de Mérida, Yucatán. Lamentablemente desde que este virus llegó a su vida, las cosas no le estaban saliendo bien a este señor, es por eso que tuvo que ingeniárselas para tener un trabajo y así poder subsistir, y lo encontró vendiendo jaladores, aunque llegar hasta este punto no fue fácil para él.
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De acuerdo con lo que Karina Matu, nieta de este abuelito, contó en su página de Facebook, el señor se quedó sin chamba gracias al coronavirus. Él trabajaba como vigilante en una privada hasta que la situación con la pandemia se complicó, pues lo consideraron como una persona de alto riesgo ante el coronavirus por su avanzada edad, así que no le quedó de otra más que buscar una opción más para sobrevivir.
Después de buscar trabajo y no encontrar uno con éxito, don Felipe se dio cuenta que lo mejor era iniciar algo por su propia cuenta. Es por eso que utilizando los conocimientos que adquirió con el paso de los años, decidió montar un pequeño taller en su casa para comenzar a reparar y fabricar jaladores en su casa, los cuales según su nieta se hacen de acuerdo a la medida que le pidan y “salen buenos”.
Según medios locales, este señor nunca había hecho jaladores, pero luego de ver una fotografía se le ocurrió que esta podría ser la forma de salir adelante y afortunadamente las cosas le están saliendo muy bien. Al darse a conocer su historia un montón de personas lo están buscando para que tenga trabajo, y él está contento de que después del momento amargo que tuvo que pasar, por fin está ganando dinero por su propia cuenta.
“No creí fuera tan grande el alcance, pero a Dios le damos gracias por poner siempre los medios para salir adelante”, comentó Karina al ver que la gente en redes sociales está reaccionando y apoyando al señor Felipe. Sí, sabemos que de repente las cosas se ven complicadas, pero son esta clase de historias las que nos hacen darnos cuenta de que siempre se puede salir adelante, con actitud y mucho esfuerzo, como este abuelito.
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